La inocencia de los niños es algo muy tierno pero en esta historia fue la causa de una tragedia, se dice que en un edificio de oficinas ubicado en la Av. Lopez Mateos un niño se metió en búsqueda de su pelota y una vez que la encontró se escondió en el cuarto piso pues escucho que un policía se acercaba y se le ocurrió hacerle una broma para asustarlo, desgraciadamente cuando el niño inocentemente grito -Buu- El policía le disparo a quemarropa pensando que se trataba de un ladrón y dejándolo sin vida casi de manera instantánea, desde entonces dicho piso fue clausurado , pero el alma del pequeño parecía no haberse ido.
Un día una de las trabajadoras de ese lugar compartió el asensor con un compañero, solo querían llegar al piso 3 pero se asustaron al ver que no se detuvo y siguió subiendo hasta el piso 4 en donde se detuvo y con pánico escucharon al interior de dicho piso la risa de un pequeño que jugaba con su pelota, imagínense la desesperación que sintieron al estar encerrados en el elevador presenciando aquel sonido, cuando por fin lograron bajar se dirigieron al guardia de seguridad para contarle lo ocurrido, pero él solo confirmo sus sospechas pues les
dijo que no eran los primeros que escuchaban al niño de la pelota, que por la noches se podía escuchar claramente al alma de aquel pequeño y que en ocasiones lanzaba su pelota por las escaleras con sus manitas marcadas por lo que algunos se asustaban tanto que renunciaban al trabajo por miedo a que se le apareciera el niño de la pelota.
En la calzada San Diego en Morelia Michoacan se encuentra una bella casona de tiempos del virreinato, pudiera ser un lugar más en esta hermosa ciudad, pero alberga una tragedia que dio paso a una leyenda, resulta que dicha casa fue habitada por Juan Nuñez de Castro junto con su segunda esposa Doña Margarita de Estrada y la hija de su primer matrimonio, la señorita Leonor. Como la típica historia de la madrastra mala, esta familia no era la excepción pues la relación de Margarita y Leonor nunca fue buena, Margarita era una mujer muy rencorosa, celosa y envidiosa de la graciosa belleza de su hijastra,
así que la trataba con mano dura, no la mantenía ocupada con los quehaceres del hogar, sin casi dejarla salir más que para lo necesario, sin embargo Leonor era tan bondadosa que a escondidas de su madrastra curaba las rodillas de los fieles que pasaban por el lugar hincados rumbo a la iglesia, ellos la llamaban "El ángel de San Diego", el rumor de aquella bella y bondadosa mujer llego a oídos de Don Miguel de la Serna, quien al verla quedo perdidamente enamorado y quiso comenzar a cortejarla, pero como ella no podía salir le dejo un carta para que se vieran en medio de la obscuridad de la noche por uno de los ventanales, Leonor acepto puesto que también le atraía el caballero. El reloj marcaba las 8 de la noche y los jóvenes enamorados se vieron por entre las rejas, pero Don Miguel era tan prevenido que mando poner un traje de calavera a su peón para que asustará a la gente que pudiera pasar por dicho lugar, mientras su patrón veía a la joven el paseaba por el inicio de la calle espantando a todos los caminates, por dicho
motivo muchas personas dejaron de salir a esas horas de la noche, pues se decía que salia la muerte o que simplemente era un alma en pena que asustaba, el plan funcionaba de maravilla , hasta que Doña Margarita descubrió el engaño, dándose cuenta de que no existía dicho fantasma y tomándole más rencor a su hijastra. La última noche que se vieron Leonor y Don Miguel se comprometieron en matrimonio , pero el padre de Leonor solo le daría su mano si entregaba una carta del virrey, así que Don Miguel partió en un viaje para conseguir dicha carta y tener la bendición para casarse con Leonor.
Como venganza Doña Margarita mando encerrar a Loenor en el sótano y dio indicaciones de que la privaran de alimento, Leonor lloro muchísimo, era muy cruel su castigo, su padre también se encontraba de viaje de negocios, así que por más que llorara y gritara nadie la ayudaría, los días pasaron y el odio de Margarita no
cesaba, tanta era el hambre de la pobre Loenor que sacaba su mano huesuda, ya sin casi carne por una de las rejas que daba a la calle pidiendo alimento, pero lejos de ayudarla , la gente le temía pues Margarita corrió el rumor de que su hijastra estaba mal de la cabeza, cuando por fin Don Miguel regreso de su viaje muy gustoso por pedir la mano de su amada, decidieron por fin sacar a Leonor, pero lo único que se llevaron fue un espanto, pues al fondo del sótano estaba el calaverico cuerpo de Leonor ya sin vida, Don Miguel sufrió mucho pues vio en esas condiciones a amor y mando ponerle un vestido de novia para casarse con ella y darle santa sepultura en el santuario de la virgen de Guadalupe.
Pero la historia no termina ahí, puesto que muchos habitantes aseguran que aún se puede ver esa mano huesuda salir por la ventana pidiendo algo de comida.
La inocencia de los niños es algo muy tierno pero en esta historia fue la causa de una tragedia, se dice que en un edificio de oficinas ubicado en la Av. Lopez Mateos un niño se metió en búsqueda de su pelota y una vez que la encontró se escondió en el cuarto piso pues escucho que un policía se acercaba y se le ocurrió hacerle una broma para asustarlo, desgraciadamente cuando el niño inocentemente grito -Buu- El policía le disparo a quemarropa pensando que se trataba de un ladrón y dejándolo sin vida casi de manera instantánea, desde entonces dicho piso fue clausurado , pero el alma del pequeño parecía no haberse ido.
dijo que no eran los primeros que escuchaban al niño de la pelota, que por la noches se podía escuchar claramente al alma de aquel pequeño y que en ocasiones lanzaba su pelota por las escaleras con sus manitas marcadas por lo que algunos se asustaban tanto que renunciaban al trabajo por miedo a que se le apareciera el niño de la pelota.
