LA LLORONA

Joaquin De Vega se enamoro de una hermosa joven llamada Mariana Altamirano de Córdoba, mujer que estaba prohibida para él puesto que el padre de ella ya la había prometido a un hombre de mucho dinero y propiedades, el amor que se tenían fue siempre el refugio para ambos, vivían su romance en silencio a escondidas de los intrusos, hasta que llego el día en que el padre de ella los descubrió y creyéndose traicionado no quiso que nadie más la pretendiera mandándola a un convento de monjas para que ningún hombre se le volviera acercar.

La última vez que Joaquin vio a su amada le prometió que el amor que le tenía jamás se moriría a pesar de la distancia y el dolor de no verla.
Años después Joaquin convencido de que no volvería a saber de Mariana, decidió aceptar como esposa a una mujer que insistía estar enamorada de él, aquella chica era blanca como la nieve y con un cabello negro como la noche, su nombre era María Catalina Barrón, llego el día de la boda y todos festejaron la unión de los jóvenes, perecían una pareja feliz, formaron una familia con tres hermosos hijos y con el paso del tiempo se acostumbraron a estar juntos, María lo amaba con locura y él aunque era cortés jamás olvido a su antiguo amor.

Un día Joaquin salio a trabajar y al caminar por la plaza, no lo podía creer, la emoción le recorría el cuerpo pues frente a él estaba Mariana, era una sensación de felicidad tan grande que no dudo en ir a abrazarla y ella no dudo en corresponderle, después un largo abrazo y lagrimas ella le propuso fugarse, diciendo que había ido en búsqueda de él, que no importaba el pasado sino estar juntos como siempre soñaron, convencido por el amor de su vida se fugo con ella abandonando a su esposa e hijos.


Algunos dicen que la llorona también se ahogo en el lago, otros dicen que se volvió loca y otros dicen que se aparece para vengarse llevándose las almas inocentes para tomarlas como hijos, puede ser que esta noche venga por ti ...
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